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lunes, 13 de enero de 2014

Hoy se decide el Balón de Oro

El líder del equipo (Bayern Munich) más laureado del 2013, el francés Frank Ribery; el jugador más destacado del momento, el portugués Cristiano Ronaldo y el calificado como mejor jugador del mundo, el argentino Lionel Messi, aspiran al gran reconocimiento individual de cada temporada, el Balón de Oro.

La gala de hoy en Zurich desvelará, por fin, el rey del futbol del 2013: el mantenimiento en el trono de Messi, ganador de las cuatro últimas ediciones, el regreso a la cima de Ronaldo, quien lo logró en el 2008 o la coronación de Ribery.

Nunca levantó tanta expectación y polémica el Balón de Oro, y tal vez tampoco antes generó una mezcla de rechazo y hastío mezclados con la emoción futbolística.

La competencia entre Leo Messi y Cristiano Ronaldo ya se alarga por espacio de un lustro, con clara ventaja para el argentino -cuatro galardones a uno. Sin embargo, en el año 2013 han coincidido una serie de circunstancias que han aportado matices a la situación y un tercero en discordia, el francés del Bayern de Munich, Franck Ribery.

En esta edición, además, el trayecto ha estado animado por el desliz del presidente de la FIFA, el suizo Joseph Blatter y por la inesperada ampliación del plazo para los votos. Dos situaciones que agitaron la controversia y pusieron en la primera fila del escaparate al galardón.

El máximo dirigente del organismo mundial de futbol, en una conferencia, ejecutó una innecesaria parodia de Cristiano Ronaldo, al que ridiculizó para dejar clara su preferencia por Leo Messi.

Blatter tuvo que soportar un sinfín de críticas y parte del mundo del futbol se alió con el jugador del Real Madrid, que puso en entredicho su presencia en la gala del lunes.

La extensión del plazo para efectuar los votos fue otra controversia. Entendida como una corriente a favor del luso, para entonces sumergido en su mejor momento, que explotó con la clasificación de Portugal para el Mundial de Brasil.

Para empezar, Messi ha estado mermado físicamente en la última recta final del año, hasta el punto que tuvo que parar 59 días a causa de una lesión muscular. El delantero barcelonista es reconocido como el mejor del mundo, quizás de la historia. Pero algunos ponen en duda su candidatura para su quinto Balón de Oro precisamente por esta lesión.

En el caso de Leo, olvidan que el argentino ganó la Liga y la Supercopa de España con su club, fue Bota de Oro y Pichichi - marcó la escalofriante cifra de 46 goles en liga el curso pasado y un total de 45 este año natural- y clasificó con holgura a Argentina para el Mundial de Brasil 2014..

Después está Cristiano Ronaldo. El portugués acabó el año de una manera espectacular, liderando al Real Madrid y a Portugal, a la que salvó en la repesca mundialista frente a Suecia, con un triplete incluido. Sus detractores recuerdan que no ha ganado ningún trofeo importante en el 2013 a nivel colectivo, pero en el aspecto individual anotó 69 goles, para ser el máximo romperredes entre las ligas de mayor relevancia en el mundo, y fue el máximo goleador de la pasada Champions con 12, mientras en la actualidad tiene nueve dianas.

Y finalmente, Franck Ribery. El francés del Bayern de Munich es considerado por muchos como el jugador del año porque con su club lo ha ganado casi todo (Liga, Copa, Liga de Campeones, Supercopa europea y Mundial de Clubes) -nada más se le escapó la Supercopa de Alemania-. Fue elegido el mejor jugador de la UEFA en Europa, por delante de Messi y Cristiano. Como siempre, los críticos argumentan que, aun siendo un excelente futbolista, no tiene el peso específico e individual de La Pulga o CR7.

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